En Pueblo Nuevo Viñas, el silencio se está volviendo costumbre. Un silencio que ya no significa paz, sino miedo. En lo que va de 48 horas, la muerte ha tocado dos veces a la puerta del mismo municipio.

La noche del miércoles 17 de septiembre, un grupo de vecinos caminaba con linternas en mano por el sector de finca Variedades, cerca del barrio El Pumpo. El rumor de que algo flotaba en el tanque de agua se volvió grito. Y el grito, llanto.

Ahí estaba el cuerpo sin vida de Melvin Daniel Hernández Arreaga, de apenas 24 años, originario del cantón Monte Redondo, en La Gavia, Pueblo Nuevo Viñas. Testigos indicaron que el cuerpo presentaba señales de violencia. Que probablemente lo mataron en otro lado y lo arrojaron al tanque como quien tira un objeto incómodo, como si la muerte fuera basura.

No hubo sirenas inmediatas. Solo miradas. Y preguntas que nadie respondió.

Sin censura en el canal de Whatsapp https://whatsapp.com/channel/0029VaC9rJcHQbS0hPCmrB0q/5913

Pero esto no empezó anoche. Apenas unas horas antes, el martes 16, otro hombre fue asesinado a balazos frente a una tienda del mismo municipio.

Entre los vecinos circula el rumor de que ambos hechos podrían estar relacionados. Se dice que Melvin podría haber tenido alguna vinculación con el homicidio del martes 16 e, incluso, con haber herido a otra persona. Sin embargo, esta información no ha sido confirmada oficialmente.

Las autoridades ya investigan el caso, tratando de establecer si existe un nexo entre los crímenes o si se trata de hechos aislados en un pueblo que ya comienza a acostumbrarse al miedo.